Y ahora.... ¿Que hacés?, cuando entendés que
nada tiene retorno, que lo que hace días era tu mayor orgullo, tu anhelación, tu pan dulce de todas las mañanas, hoy se pierde como agua entre los dedos, se va, sin más que decir ni hacer. Y así se te va rompiendo el corazón en miles de pedazos, de todos los tamaños. Y hoy, una vez más te das cuenta que estás sola, que lo que ayer te hizo reír, hoy te hace la persona más infeliz del planeta, que no sabés para donde salir corriendo, que tus ojos arden de tanto llorar, y tu almohada es tu mejor aliada.
No sé cuanto más haya que hacer para lograr cierto grado de confianza en la otra persona (no pido mucho) y no morir en el intento, claro. Confianza, ¿Tanto nos costó?, hoy, daría tantas cosas para volver a ese momento donde en vez de dar un paso adelante, dí dos atrás (y VOS sabés a que me refiero) y apostaría mi vida a que ESTO entonces, no sonaría tan melancólico... Sé que cuesta verlo así, pero es lo que -nos- pasa, esto dejó de ser hace tiempo algo furtivo para los dos, y lo sabés. Y aunque sé que te cuesta decir adiós, por más que no quieras, es tu decisión, aunque me duela.
Y entonces te volvés a preguntar que hacer! Cuando estás viendo irse, al
amor de tu vida, con el que pasaste esos momentos que aunque sabés, nadie te los va a quitar, a la vez entendés porque razón debías valorar cada instante, porque ahora lo entendés todo! Era por él que el corazón vibraba cada vez que esperabas un mensaje, cada vez que sabías que lo ibas a ver, que siempre que lo mirabas, se te llenaba los ojos de amor y sentías mil pulsaciones por segundo. Por él te peinabas mil veces con tal de estar siempre bien (para él) y sabés que?
NUNCA LO NOTASTE, siempre pensaste qe era algo normal en vos, pero hubo un día, cuando lo empezaste a extrañar, cuando te dejaste de arreglar porque no lo veías, fue ahí donde te diste cuenta que te sentías hermosa solo estándo con él, solo él te hacía ver lo hermosa que eras, y aun así, se fue. Y entonces hoy entendés porque, cuando te enseñó a bailar el balls lo tenías que retener, sí justo ahí, ese momento, guardado, ojalá nunca se borre, como tantas otras cosas, se borran de mí. Y aunque diste más que tu vida, y hasta cuando lo empezabas a entender (Cúanto me costó!), cuando empezaste a entender que era
ÉL el que le daba color a tu vida, ahí, justo ahí, se esfumó todo.
Y ahora? Y ahora solo queda sentarse a esperar, porque mi vida la llevó él entre sus manos, y aún así, no se dió cuenta.